Inicio

Erase una vez un misterioso hombre se hallo en medio de la noche tan oscura y solitaria, el iba rumbo a su morada, cuando de repente en el camino se topo con algo tan brillante que cuando lo encontró, su camino parecía tornarse mas claro y toda esa oscuridad se fue disipando. Que suerte tengo pensó, ya que el se hallaba un poco perdido y este extraño objeto lo ayudo. Aquel objeto era un espejo pero era diferente al resto ya que en la oscuridad no se veía su reflejo. Continuo su camino sin ningun apuro hasta que llego. El se quede atónito por tal objeto y por eso lo cuido de todos y lo guardo solo para sacarlo en la noche. Pasaron los días con la rutina y el vaiben de las responsabilidades diarias. Hasta que un día el se hallaba triste y sin ánimos, pues todo se le estaba saliendo de las manos, parecía nada salirle bien, perdió su trabajo y sus relaciones no iban tan bien, se sentía solo y sin ganas de nada. Entonces una tarde que se animo a salir a caminar se encontró con un viejo amigo, este le intento animar despues de escuchar atento a lo que le estaba ocurriendo y le dijo muy sereno, creo que no es el final sin duda has tenido una mala racha, y este le entrego un espejo que era muy similar a aquel que encontró días atrás. Sorprendido dijo yo tengo uno igual pero lo uso solo en la noche, y el asombrado dijo no es una linterna, quiza no has visto mas alla, te ayuda a alumbrar es verdad pero yo te voy a mostrar cual es su verdadera funcion, entonces le entrego el espejo y le dijo hecha un vistazo y dime que ves. Así el hombre miro su reflejo con otro semblante y se dio cuenta que lo que le paso era solo un instante y que toda esa nube gris se disipaba y podía ver que el tenia potencial y saldría adelante. Puesto que en ese reflejo se vio calmado y se tranquilizo, fue como si viera ahora todo mas claramente. Entonces el amigo le dijo a pesar de las dificultades no olvides quien eres y recuerda mirarte siempre como si fueras lo mejor del mundo y con ilusión, porque tu eres el creador de tu propia realidad.

Nuestra labor como profesionales es guiarles para que el espejo en el que os reflejéis todos los días sea un lugar agradable y os motive. A pesar de las circunstancias, los problemas del día a día.